14.10.2013

Queridos internautas y admiradores,

Sí, quise crear este blog a pesar de todo, porque Manuel Diez Matilla es un poco a la pintura española de la segunda mitad del siglo XX lo que el gran Manolo Caracol fue al Cante Flamenco, o mas recientemente Chano Lobato, una figura legendaria, un artista maduro y consumado, a las facetas más variadas, un hombre de antología.

Manuel Diez era a la pintura lo que el gran Carlos Montoya ha sido a las saetas y al absurdo como el berruguete, un gran precursor artistico.

Aunque mi madre no quiere que se hable de ella, yo mismo quise hacer un trabajo introspectivo y retrospectivo sobre mi padre, este maestro tan grande, este artista tan grande, uno de los últimos de su generación. Una generación sacrificada como lo dice mi madre. Merecía un trabajo completo, contradictorio y de calidad. Le llevé toda mi atención, como trabajé con él durante toda su vida.

Si investigadores americanos ya evocaron la pista del crimen en cuanto a Van Gogh, y si un cuadro de Gen Paul de la estación de la Frette-sur-Seine estába haze unos tiempos ya en cartelera sobre la plaza de la estación de la ciudad del mismo nombre, poca gente hizo comunicación para él, porque Manuel Diez no lo deseaba verdaderamente tampoco. El hombre tenía sus jardines secretos. A la merced de mi lugar de trabajo, encuentro a veces algunos de los que quería y admiraba.

Les recomiendo a los internautas esta herramienta de trabajo interesante, a veces bastante cautivante, que sale de caminos trillados, y que cepilla un panorama interno y externo exhaustivo de su carrera verdaderamente extraordinaria y fuera del comun. Era un pintor exepcional, de mucha paciencia, de mucha limpieza y madurez, veia " de léjos ", y iba " a lo mas cerca ".

Desgraciadamente, este blog no carga las fotos de los textos word, en cambio, fotos aparecen bien sobre los membretes.

Les deseo una buena lectura, por el momento más bien en francés, en español, y en alemán, antes de intentar una en inglés.

Con mis agradecimientos más sinceros. Buena visita a todos.

Christian Diez Axnick.